Con faldas… y a lo loco
¿El mundo está loco?
¿Se ha perdido el norte?
¿Los poderes se preocupan por solucionar los problemas sociales o por
su propio status?
Me gustaría ver la misma cantidad de gente concentrada celebrando el
fin del paro como la que había estos días en el Vaticano esperando la “fumata
blanca” y el anuncio del nuevo Papa.
Por cierto, me pregunto cuál es el índice de paro en ese Estado
dirigido por los representantes de Dios en la Tierra, el Estado del Vaticano.
Parecen vivir ajenos a los problemas que afectan a millones de personas como pueden
ser el paro o los desahucios.
Me gustaría que se le diera la misma cobertura a las labores evangélicas
a través de misiones que muchos siervos de Dios realizan en miles de rincones
del mundo, ayudando a los desfavorecidos, intentando aportar un poco de luz en
su vida, conviviendo con los pueblos, ayudándoles.
Pero eso no es espectáculo, es decir, no vende.
Muchos responsables políticos han valorado el teatro de estos días
que ha tenido como escenario el Vaticano.
Y la Conferencia Episcopal salta de alegría. Ni que estuviéramos
salvados con el “Habemus Papam”.
Menos “Papam” y más trabajo. Y no me digan que son cuestiones
diferentes. Que salga el portavoz de la Conferencia Episcopal mostrando su
preocupación por el paro y aportando medidas para solucionarlo, que muestre su
indignación por la falta de trabajo.
Pero claro,
están demasiado ocupados con lo suyo.
¿Tendrá que ampliar su horario la sauna gay “Europa Multiclub” ubicada
en uno de los 20 departamentos del edificio de la Congregación para la
Evangelización de los Pueblos? Edificio histórico en Roma propiedad del
Vaticano.
¿Celebrará allí el Vaticano la fiesta de bienvenida al nuevo Papa?
El mundo está loco.
Ya lo decía Billy Wilder, “Con faldas y a lo loco”.